Uno de los momentos importantes en su servicio al Señor de nuestros pastores aliancistas en Chile es el ser «ordenados», es decir, cumplir oficialmente el período de preparación en el que se encuentran, tras salir del Seminario Teológico y de esta forma ser oficializados como pastores de Iglesia Nacional.
Esta vez fueron cuatro pastores quienes cumplieron su período correspondiente y fueron ordenados: Jairo Gallegos, parte del equipo pastoral de nuestra segunda iglesia de Temuco; Juan Cayún, pastor de la iglesia de Temuco ubicada en el sector de Amanecer; Cristian Aravena, pastor de la iglesia de Ancud; Luis Mancilla, pastor de la iglesia de Hualpén; y Moisés Cayún, pastor de la primera iglesia de Concepción (las últimas 2 en la octava región). Todos ellos con varios años sirviendo activamente en estas congregaciones.
En el caso del pastor Jairo, se realizó en su iglesia una ceremonia especial de ordenamiento en donde se le entregó un galvano conmemorativo y se oró por su vida y ministerio, instancia en la que además participó el pastor Andrés Stuardo, parte del equipo pastoral también de la segunda Iglesia de Temuco y quien ya había sido ordenado, pero no había tenido la oportunidad de hacerlo de manera presencial (debido a las restricciones provocadas por la pandemia).
Por su parte, el pastor Juan Cayún también realizó una ceremonia especial en su iglesia donde se oró por su vida y se conmemoró este proceso especial de ordenamiento, donde él cumple este proceso en su formación ministerial. Asimismo, el proceso de ordenación del pastor Cristian Aravena también se celebró con una ceremonia especial en su iglesia, en la que la congregación oró por su vida y la de su esposa. El pastor ya lleva varios años sirviendo en Ancud.
Respecto al pastor Moisés Cayún, se realizó en la primera iglesia de Concepción una ceremonia especial donde se le entregó un reconocimiento por este proceso, además de tener un tiempo de oración por su vida, junto a representantes del distrito y la Junta Ejecutiva nacional. Y en el caso del pastor Luis Mancilla, también se dio un espacio en el culto dominical de su congregación para tener un tiempo especial de oración donde se encomendó su vida, familia y ministerio, en una iglesia que hace poco tuvo la bendición de poder inaugurar su nuevo templo.
En todas estas ceremonias participaron representantes de la Iglesia Nacional, quienes además oficiaron dichas ceremonias, y tuvieron palabras de oración para los siervos ordenados, además de los mejores deseos y bendiciones para sus ministerios. ¡Enviamos un gran y afectuoso saludo a nuestros pastores y sus familias!