La centenaria primera Iglesia Alianza Cristiana y Misionera de Osorno comunica el fallecimiento acaecido en la madrugada de hoy 12 de Abril, de nuestra querida hermana Yolanda Elisa Aguilar Muñoz, una sierva del Señor que dedicó su vida a la oración, que mostró invaluables muestras de cariño y aprecio a quién necesitara de ellos, nuestra Iglesia está muy triste por su partida, pero nuestro consuelo está en el Señor.
Algunos datos biográficos:
Nuestra querida Yolanda nació en la comuna de Puerto Octay el 01 de Julio de 1936, pero fue registrada cuatro años después, por tanto su nacimiento fue en 1932. En 1965 contrajo matrimonio del cual nacieron cuatro hijos: Lily, un hijo que falleció al nacer, Armando y María Elisa.
En 1970, luego de sufrir la partida de su recién nacido hijito, escuchó el evangelio y respondió a él. Puso su fe en Jesús y junto a su hija Lily oraron para que Dios bendiga su hogar con otro varón. Su oración fue respondida en 1971 con la llegada de su segundo hijo varón. Desde ese año permaneció fiel a la fe en Jesús. En 1986 se integró como miembro en plena comunión de la Primera Iglesia Alianza Cristiana y Misionera de Osorno, siendo bautizada por el pastor Manuel Rivas.
En 1987 sola se hizo cargo de su hogar, de sus dos hijas y su hijo y siguió trabajando para darles lo mejor que podía. “Yolita” supo con propiedad del sacrificio y de la fidelidad de Dios en todo lo que emprendió en su trayectoria de vida.
Su vida cristiana fue marcada por varios milagros, varias veces estuvo al borde de la muerte por causas cardiacas pero Dios obraba en ella. El Hospital la calificó como “enfermo que milagrosamente se levanta”, ésta era una oportunidad propicia que ocupaba para dar testimonio de su fe. Además, se dedicó a uno de los ministerios más silenciosos y fructíferos de la vida cristiana, la oración; la hermandad afligida recibía su cariño mediante la oración, incluso sus vecinos pasaban a tocar su puerta frecuentemente a presentarles necesidades. Hasta no hace mucho tiempo seguía tomando su cuaderno de oración, donde anotaba todas las peticiones que llegaban a ella. Siempre recordó a los pastores, sus familias, a los misioneros, y a todos quienes ella pudo ayudar mediante la oración.
Su himno favorito “más allá del sol” lo cantó cada una de las mañanas que le concedió el Señor, hoy su voz se apagó pero su alma celebra ansiosa el retorno de Jesús.
“La mujer que teme a Jehová, ésa será alabada” Prov. 31.30
Con estas breves pero sinceras palabras, deseamos a toda la familia Águila Aguilar y a toda nuestra comunidad, que Dios les bendiga, consuele y ponga su paz en medio de nuestra aflicción.
Pr. Marcelo Barrientos Manríquez
Primera Iglesia Alianza Cristiana y Misionera de Osorno